El cura Justo José Ilarraz fue condenado por unanimidad a la pena de hasta 25 años en prisión tras ser declarado culpable de haber abusado de siete menores de entre 10 y 14 años cuando era su preceptor en un seminario de Paraná.
Se trata del segundo juicio en Entre Ríos contra un integrante de la iglesia Católica, tras la condena a 25 años de prisión efectiva, también por abusos, al cura Juan Diego Escobar Gaviria en septiembre de 2017.
Ilarraz fue encontrado culpable de abuso y corrupción agravada de menores cuando era preceptor en el Seminario Menor de Paraná, entre 1984 y 1995, por lo que sus víctimas, que testimoniaron en el juicio, hoy tienen alrededor de 40 años.
Asimismo, los jueces ordenaron la prisión domiciliaria del cura, quien permanecerá alojado en la Alcaidía hasta que se pueda cumplir la orden del Tribunal.
"Soñamos con este momento; se hizo Justicia", dijo una de sus víctimas luego de escuchar el veredicto.
"El papa Francisco debe mirar a su pueblo y si me está escuchando le quiero decir: este es el momento de que haga algo", reclamó otra de los denunciantes del cura Ilarraz.